Fin: Santa Ana La Real
Duración: 1h 45 min.
Dificultad: Media – Baja
Indicador IBP: 22 DB. Más información sobre este indicador.
Distancia: 6,5 Km
Desnivel Max.: 200 m
Album de Fotos: en el siguiente enlace puedes ver las fotos del camino:
Descripción:
Este sendero empieza en el barrio abandonado del Castañar. En pocos metros llegarán al cementerio, que quedará a su izquierda. En la mayor parte del camino le acompañarán alcornoques, pinos de flandes, que es como se denomina aquí al Pinus pinaster, y castaños . Junto a estas especies aparecen jaguarzo, jara pringosa, algunas retamas, brezos y aulagas, que colorean de blancos, rosas y amarillos el espeso matorral en algunos tramos del sendero.
Tras algo mas de un kilómetro del recorrido, y después de pasar por una gran extensión de pinos de flandes, llegarán a un llano conocido como La Venta. En esta encrucijada de camino observarán a la derecha un denso matorral de zarzas y matas de lentisco, algunos de estos de gran porte. Se alcanza en esta zona el punto mas elevado del sendero. En pocos metros empiezan a aparecer encinas salteadas, en la zona llamada Los LLanazos. A partir de este punto empieza a bajar y en pocos metros la vegetación cambia a un denso matorral con zarzas, aulagas y encinas, que le acompañarán hasta la llegada al Puente de los Casares, a la entrada de Santa Ana La Real. Optaremos por ir a la cascada de Jollarancos, muy cerca del final del sendero. Tiene un saldo de agua de unos 50 metros y es uno de los parajes mas hermosos del Parque Natural.
Cascada de Jollarancos (O Joyarancon).
En el levante de la Sierra de los Palos Altos, esta cascada coincide con el nacimiento de la Rivera de Santa Ana, afluente de la Rivera de Santa Aurelia, que vierte sus aguas al Odiel.
El cauce recorre terrenos paleozoicos con intercalaciones arenosas y arcillosas.
La cascada se escalona en pequeños saltos , algunos de hasta 10 metros, que vierten sus aguas en balsas naturales desde cuyos rebosaderos continúan el descenso hasta el valle.
Paralelo a la línea principal de cascada serpentea un cauce secundario que alivia la corriente en las épocas de grandes lluvias.
El sendero corta el cauce de la Rivera de Santa Ana en dos vados, salvados por pequeños puentes peatonales que facilitan el acceso.
Los mismos veneros y cauces que alimentas las aguas del enclave mágico de la Peña de Arias Montano, al este y de todas estas sierras en el contacto con la llanura que desciende hacia el Atlántico, borbotean en Joyarancón recordando las palabras que el Nóbel, Camilo José Cela dedicó a estos parajes, el lugar en el que Dios Nuestro Señor rompio su mejor cristalería.
Puedes descargar Ficheros GPS Perfil y Mapa en wikiloc.com
Haz Click en la imagen para agrandar
Mapa:Haz Click en la imagen para agrandar
Haz Click en la imagen para agrandar
0 comentarios:
Publicar un comentario